¡Seguimos con nuestra sección de servicios y productos! Esta vez: supermercado sostenible.
¿Cuando vas a hacer la compra te preocupa que el establecimiento al que vas sea sostenible? ¿te gustaría intentar comprar en instalaciones que se preocupan por su impacto medioambiental?
Hemos querido ir un paso más allá para recabar algunos criterios que podemos tener en cuenta para elegir un supermercado que siga prácticas sostenibles.
Plan de sostenibilidad
Lo primero que tendríamos que tener en cuenta es si esa empresa tiene compromisos medioambientales, económicos y sociales que ya haya implementado o aspira a implementar en un periodo de tiempo.
Este recurso normalmente lo puedes encontrar en su página web, donde podrás acceder y leer esas acciones para entender su nivel de compromiso.
Fuentes de energía renovables
Los supermercados son establecimientos que requieren una gran demanda de consumo eléctrico. Debemos entender qué parte de esta energía es producida por energías renovables y si la empresa apuesta por reducir su huella de carbono con esta práctica.
Distribución y logística sostenible
¿Utilizan o apuestan por una flota de transporte sostenible?
La distribución y la logística es un pilar fundamental para el funcionamiento de un supermercado, por eso es importante prestar atención si el transporte que utilizan se “alimenta” de combustibles fósiles como la gasolina o el gasoil. Como alternativas más deseables: gas natural, que reduciría las emisiones de óxidos de nitrógeno, mejorando la calidad del aire, y muchísimo mejor si usan vehículos eléctricos que reducirán además la emisión de gases de efecto invernadero.
En este apartado entraría también el análisis de los productos que abastecen al supermercado, ¿apuestan por el producto local y de cercanía? ¿los alimentos son importados? Y por tanto, ¿recorren una gran cantidad de kilómetros?
Residuo cero
¿Tienes la posibilidad de comprar tus frutas y verduras sin bolsas de plástico? O lo que sería mejor, ¿ni siquiera tienen las bolsas de plástico para este propósito?
Es importante saber las políticas que el supermercado está implementando para la reducción de los residuos, tanto del propio establecimiento como por ejemplo reciclar y separar los residuos que generen ellos mismos, como para sus usuarios, por ejemplo dejarte llevar tus propios recipientes para llevarte los productos de la carnicería, pescadería, etc.
Desperdicio de comida
Los residuos generados por la alimentación suponen el 8% de las emisiones totales de gases de efecto invernadero producidos por el hombre.
¿Qué hace la empresa con los productos que están a punto de caducar? ¿tienes disponibles neveras con ofertas de estos tipos de productos? ¿participan como proveedores en proyectos que evitan el desperdicio de comida?
Con estos criterios podríamos analizar si los establecimientos a los que vamos a comprar están siguiendo ciertas prácticas sostenibles con el que reducir su impacto medioambiental, y, así poder continuar por el camino de un consumo más responsable y sostenible.