¿Quieres entender mejor cómo es tu huella de carbono en casa?
Empecemos por entender cuales son las fuentes de emisiones en nuestros hogares.
Por un lado tenemos las emisiones directas. Esas son las que se generan físicamente en el hogar, y entre ellas tenemos por ejemplo las asociadas al uso de combustibles (habitualmente para calefactar la casa, para agua caliente, y a veces para cocinar) tales como el gas natural. También hay otras directas menos obvias, como la de los gases de los equipos de aire acondicionado que se fugan a la atmósfera (por eso el técnico tiene que ir a «llenar el circuito» de vez en cuando), que son habitualmente gases fluorados con un potencial de efecto invernadero enorme.
Por otro lado tenemos las emisiones indirectas, consecuencia de las actividades que realizamos en el hogar pero no directamente generadas en él.
Un caso de emisión indirecta es la electricidad que consumimos, que se genera en otro lugar y nos llega a través de la red eléctrica. Nuestro consumo de electricidad en casa nos permite tener luz artificial, alimentar los electrodomésticos, ver la tele, cargar el móvil, etc. Esa electricidad puede haber sido generada con combustibles fósiles, y las emisiones asociadas a ello serían parte de las emisiones indirectas de nuestro hogar.
Otro caso quizás menos obvio, sería el de las emisiones de otros servicios necesarios para que vivamos en nuestra casa. Por ejemplo las emisiones asociadas al seguro del hogar que tenemos contratado, o a la hipoteca que pagamos. Ambos servicios requieren que una empresa tenga actividad y emita diversos gases de efecto invernadero (que pueden ser más o menos en función de la empresa, claro).
En The Planet App puedes ver un desglose de tu huella de carbono en el hogar. Si tienes la app instalada en el mismo terminal que lees esto puedes verla en este enlace, también puedes acceder a la app y en la pantalla «Huella» clicar sobre «Ver desglose».
La huella de carbono de una persona residente en España es en promedio de 5.5 ton. de CO2 equivalente al año. La categoría hogar es aproximadamente un 10% de este total, es decir, al año generamos directamente o inducimos la emisión de algo más de 0,5 toneladas de CO2 solo con nuestra actividad relacionada con el lugar en el que vivimos.